Escuché el discurso de la reaparición de Trump. Se necesita de una voz crítica de peso que se oponga al horror que ya es real. Allí radica la validez política del presidente despojado y no en la posibilidad de un segundo mandato que jamás ocurrirá. Creo que alguna vez les dije que tras la muerte del conservadurismo y de la “democracia” acaecida en noviembre pasado, el presidente Trump, a pesar de sus profundos errores cometidos durante el último año frente a la histeria del covid, quedaría como la postrera representación emblemática del pensamiento de derechas. Y en ese camino va.
Pd: Cuando hablo de “errores cometidos frente a la histeria del covid”, me refiero a la claudicación frente a los grandes intereses que promovían el terror, me refiero al no despedir a Fauci, a no enfrentarse claramente a la retórica colectivista de políticos e instituciones y a dejar que la nación fuera engullida por el miedo… ah, y al hecho vacuo e inoperante de darle validez a la histeria señalando a China como el fantasma de Canterbury de ocasión…
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